Disnea o dificultad para respirar: estos son los síntomas y causas

La disnea se define como la incapacidad de respirar suficiente aire y puede ser una señal de estar padeciendo algún problema respiratorio o enfermedades cardiacas y pulmonares.

De acuerdo con el portal de salud Healthline, una persona puede tener disnea de forma temporal y esto ocurre cuando hace ejercicio o realiza una actividad física que requiere esfuerzo.

Como su nombre lo indica, es temporal, es decir que la persona puede experimentar dificultad para respirar por unos minutos y luego recuperar la frecuencia respiratoria normal. Sin embargo, cuando este problema se extiende por más tiempo puede ser señal de estar sufriendo de un problema respiratorio más complejo y la disnea es solo un síntoma.

Según el portal, en los casos más graves la persona puede sentirse como si se sofocara, así como una presión en el pecho que se produce constantemente, no solo de forma temporal.

Expertos del portal médico aseguran que si un individuo realiza ejercicio con regularidad, tener disnea es algo normal, pero debe consultar a médicos si tiene dificultad de respirar más pronto de lo usual después o durante la actividad física.

Igualmente, es preocupante si el paciente se queda sin aliento después de una actividad que usualmente realizaba sin problemas o si empieza a experimentar síntomas sin ninguna explicación.

Si la persona tiene algunos de estos problemas y la falta de respiración es constante, puede revelar problemas a largo plazo y por ello, según el portal, es clave consultar al médico antes de iniciar algún tratamiento y definir qué enfermedad puede estar subyacente en el síntoma.

Las enfermedades que pueden provocar una falta de aire repentino y prolongado son: insuficiencia cardiaca, presión arterial baja, neumonía, embolia pulmonar, que significa un coagulo de sangre en los pulmones, intoxicación por monóxido de carbono y estrés o ansiedad.

Además, de acuerdo con el portal, si la dificultad de respirar se extiende por más de cuatro semanas se trata de un problema crónico y la persona puede estar padeciendo enfermedades como enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), que incluye enfisema y bronquitis crónica, enfermedad pulmonar intersticial (cicatrices en el tejido del pulmón), condición física deficiente, obesidad y enfermedad cardíaca.

El asma también puede considerarse como un padecimiento crónica y que genera una emergencia a corto plazo, cuando a la persona le da un ataque por eso es clave contar con un inhalador a la mano para controlar la crisis, aunque lo más importante es asistir al médico para poder recibir el tratamiento adecuado.

Tratamientos

La disnea puede tener una causa subyacente que puede ser tratada sin medicamentos.

Por ejemplo, sentir dificultad para respirar puede relacionarse con obesidad o con una condición física deficiente, según explica el portal de salud.

Para ello, la persona solo debe cambiar sus hábitos alimenticios y hacer más actividad física, claro está, bajo recomendaciones de su nutricionista para evitar sufrir de otras enfermedades más adelante.

Así mismo, si la persona empieza a padecer de EPOC o problemas pulmonares necesitan de la atención de un neumólogo o un experto en la salud de los pulmones. En los casos más terribles, la persona necesitará de oxigeno suplementario usando un tanque portátil en momentos en que se sienta la fatiga pulmonar.

Por otra parte, si el caso se trata de problemas del corazón, esto significa que el corazón es demasiado débil para bombear la sangre con fuerza. En este tipo de casos también hay una rehabilitación guiada por un médico. Para los casos graves se puede llegar a necesitar una bomba artificial que realiza el trabajo del corazón, según explicó el portal.

En cualquiera de los casos, la disnea temporal es prevenible si se cuenta con una dieta balanceada, ejercicio regular, evitar hábitos como fumar y no vivir en zonas donde haya demasiada contaminación ambiental.