VIDA MODERNA
Hemoglobina: estos son los alimentos que ayudan a aumentarla de forma natural
Los alimentos ricos en hierro y folato son clave para aumentar los niveles de glóbulos rojos.
La hemoglobina es una proteína que hace presencia en los glóbulos rojos. Estas células son responsables de transportar oxígeno al cuerpo, además de dióxido de carbono de las células hacia los pulmones. Cuando una persona tiene bajos los niveles de esta proteína puede tener dificultades para que el cuerpo realice estas funciones.
La anemia normalmente comienza poco a poco, así que es posible que las personas no noten ningún cambio en su organismo al principio. Sin embargo, a medida que el nivel de hemoglobina baja es posible que se empiecen a presentar síntomas como latidos rápidos del corazón, frecuencia respiratoria acelerada, dificultad para respirar y mareos, según indica la American Cancer Society.
También es posible que se genere dolor en el pecho, hinchazón de las manos o los pies y color de la piel y de la boca y encías con un aspecto más pálido de lo habitual.
También, cuando la persona sufre de talasemia, una enfermedad hereditaria que evita que la hemoglobina funcione adecuadamente; anemia drepanocítica, un trastorno genético que causa una reducción en los glóbulos rojos y hemoglobina.
Los niveles bajos de hemoglobina también pueden ser causados por una enfermedad pulmonar, fumar en exceso, por quemaduras y ejercicio físico extremo.
El cuerpo necesita ciertas vitaminas, minerales y nutrientes para producir suficientes glóbulos rojos. El hierro, la vitamina B12 y el ácido fólico son tres de los más importantes. Es posible que el cuerpo no tenga suficiente de estos nutrientes debido cambios en el revestimiento del estómago o los intestinos que afectan la forma como se absorben los nutrientes, alimentación deficiente o una cirugía en la que se extirpa parte del estómago o los intestinos, indican especialistas de MedlinePlus.
Una persona puede aumentar sus niveles de hemoglobina en casa de la siguiente manera:
1. Más hierro: Una persona con los niveles reducidos de hemoglobina puede beneficiarse de comer más alimentos ricos en hierro. El hierro actúa mejorando la producción de hemoglobina, lo cual también ayuda a formar más glóbulos rojos. Algunos de los alimentos que lo contienen son la carne y pescado, productos de soya, huevos, brócoli, vegetales de hojas verdes como la espinaca y nueces y semillas.
2. Aumento de folato: El folato es un tipo de vitamina B que juega una parte esencial en la producción de hemoglobina. El cuerpo usa el folato para producir hemo, un componente de la hemoglobina que ayuda a transportar el oxígeno. Si una persona no obtiene suficiente folato, sus glóbulos rojos no podrán madurar, lo que podría causar anemia por deficiencia de folato y niveles bajos de hemoglobina, indica Medical News Today. Es aconsejable consumir carne de res, espinaca, arroz, maní, fríjoles, aguacate y lechuga.
3. Absorción de hierro. Si bien consumir hierro es importante, también es relevante que el cuerpo lo asimile de la mejor forma y para ello se requiere del consumo de alimentos ricos en vitamina C, como frutas cítricas, fresas y los vegetales de hoja verde como la espinaca. Tomar un suplemento de vitamina C también puede ayudar.
De igual forma, la vitamina A puede ayudar al cuerpo a absorber y usar el hierro. En la lista de alimentos ricos en esta vitamina están el pescado, el hígado, la calabaza, la acelga y la col rizada.
4. Tomar suplementos de hierro. Es posible que el médico le aconseje a un paciente con niveles extremadamente bajos de hemoglobina que tome suplementos de hierro. La dosis dependerá de la condición de cada persona. Sin embargo, es importante que los pacientes sepan que consumirlo en exceso puede ser peligroso, pues puede causar hemocromatosis, que a su vez puede provocar enfermedad hepática y efectos secundarios como estreñimiento, náuseas y vómitos.
Si bien muchas personas pueden mejorar sus niveles de hemoglobina con cambios en su alimentación diaria y con suplementos, lo aconsejable es consultar al médico. Si los niveles de hemoglobina permanecen bajos, es posible que la persona necesite más tratamiento, como una transfusión de sangre.
Dependiendo de lo que esté causando la hemoglobina baja y los tratamientos que se prueben, puede tomar hasta un año para que los niveles lleguen a un rango saludable, indican los especialistas.