Venas várices: estos son los ejercicios que ayudan a combatirlas

Las venas várices son venas retorcidas y agrandadas. Si bien cualquier vena superficial es potencialmente varicosa, las venas más propensas a serlo son las de las piernas, debido a que estar de pie y con una postura erguida por largos periodos de tiempo aumenta la presión en las venas de las piernas.

Normalmente las venas varicosas o ‘arañitas’ son consideradas simplemente como un problema estético, pero la verdad es que pueden desencadenar episodios dolorosos y problemas de salud más graves, pudiendo ocasionar várices, hinchazón en las piernas o cambios de la piel e incluso formación de llagas cutáneas en la parte baja de las piernas.

Ya que estos problemas podrían empeorar con el paso del tiempo, es de ayuda que conozca y aplique algunos cuidados personales que puede implementar desde la comodidad de su hogar para prevenir úlceras cutáneas, reducir malestares y por supuesto, evitar o frenar la aparición de venas varicosas.

Use medias de compresión

Las medias de compresión están hechas precisamente para ayudar con la hinchazón en las piernas. Estas medias funcionan apretando suavemente las piernas para estimular la elevación de la sangre.

La actividad física siempre puede ser de utilidad

Se puede realizar ejercicios suaves tanto para fortalecer el músculo como para mejorar la circulación de la sangre de las piernas al corazón. Mayo Clinic recomienda los siguientes ejercicios:

• Acostarse boca arriba. Mover las piernas en círculos como si estuviera pedaleando. Extender una pierna hacia arriba y doble la otra. Intercalar el ejercicio con cada pierna.
• Pararse sobre una escalón y ubicar los pies en el borde, sobre el metatarso. Ponerse en puntas y luego dejar caer los talones por debajo del escalón. Mientras realiza este ejercicio, estirar sus pantorrillas. Repetir de 20 a 40 veces este estiramiento.

• Realizar una caminata de 30 minutos por 5 días a la semana. Recomiendan caminar hasta el lugar de trabajo.
• Realizar natación suave. Se nadar por 30 minutos al día, durante 5 veces a la semana, pero es importante recordar que cualquier tiempo dedicado a la actividad física es de utilidad.

Elevar los pies

Elevar las piernas puede disminuir el dolor y la hinchazón; para esto, bien puede hacerlo sobre una almohada cuando se encuentre en reposo o durmiendo, o sobre el nivel del corazón, 3 o 4 veces por 15 minutos cada vez al día.

De igual manera, puede ayudar si reduce su tiempo sentado o de pie al día. Cada vez que se siente o se pare, estire y flexiones sus piernas cada dos minutos, para mantener la correcta circulación de las piernas al corazón.

Cuidar la piel

Si mantiene su piel bien hidratada y humectada, podrá ayudar a que se vea y se mantenga saludable. Antes de recurrir a cualquier tipo de lociones, cremas o ungüentos antibióticos, deberá consultarlo con un especialista. Se sugiere no utilizar los siguientes productos, debido a sus posibles efectos adversos:

• Antibióticos tópicos, como neomicina.
• Lociones de secado, como la calamina.
• Humectantes naturales; por ejemplo, la Lanolina.
• Benzocaína u otras cremas que insensibilizan la piel.

Para prevenir una infección, debe tener particular cuidado con las úlceras cutáneas en la pierna y alrededor de los tobillos.

¿Cuándo es necesario acudir al médico?

Es recomendable acudir al médico si presenta alguno de los siguientes hechos:

• Las varices son dolorosas.
• El aspecto de las várices luce peor cada vez.
• Elevar las piernas o reducir el tiempo en el que está de pie no parece ayudar.
• Presenta fiebre o enrojecimiento en la pierna.
• El dolor o la hinchazón parecen aumentar súbitamente.
• Le aparecen úlceras en la pierna.