¿Cómo se clona a una mascota? La práctica que podría convertirse en tendencia por influenciadores

Una influenciadora se ha hecho notar luego de perder a su gata llamada Chai por complicaciones quirúrgicas. En consecuencia, Kelly Anderson perdió miles de seguidores, pero causó revuelo al decidir clonar a la felina.

La mujer apareció en varios medios de comunicación internacionales y en una de sus entrevistas mencionó que “algunas personas pueden comprar un auto, yo compré un clon”.

De acuerdo con las declaraciones, Anderson se contactó con una organización llamada ViaGen Pets, localizada en Cedar Park, Texas, para volver a tener a su mascota.

Así como Kelly, otras figuras públicas han tomado la decisión de clonar a los animales, como el caso de la actriz Barbara Streisand, que en 2018 quiso duplicar a su perro. Como resultado, las clonaciones se están convirtiendo en un negocio rentable que puede costar el equivalente a más de 300 millones de pesos colombianos, según el caso.

Las prácticas comerciales viven en constante transformación y el negocio de la clonación no es la excepción. Cientos de influencers tienen a sus mascotas y aunque los animales pueden tener una buena calidad de vida, su aparición en redes sociales aumenta el target, en este caso, la cantidad de seguidores.

En el caso de Anderson, todo gira alrededor de los animales, pues su contenido está vinculado con el mundo de las mascotas. De acuerdo con medios internacionales, su gata Chai murió en 2017 y en ese entonces pagó un aproximado de US$25.000 para clonar al animal (unos 78 millones de pesos colombianos).

Para llevar a cabo el proceso, ViaGen Pets explica que lo primero que se realiza es la toma de una muestra de piel, que se puede hacer cuando el animal está con vida y posteriormente es almacenada.

Por otro lado, si la mascota murió no pueden pasar más de cinco días para recoger la muestra. “Enviamos un kit de biopsia, que el veterinario utilizará para recolectar una muestra de tejido del gato o perro. Este enviará esa muestra de piel al laboratorio de ViaGen y allí cultivaremos millones de células a partir de esta. Luego, esas células cultivadas se congelan y se almacenan de manera segura por años para ser utilizadas en la clonación de la mascota, cuando el dueño desee hacerlo”, dice la organización que ofrece servicios de clonación y preservación del ADN.

Luego de esto, se prosigue con el uso de un óvulo de un animal donante y se fusiona con el material celular cultivado. Todo esto, para producir un embrión que debe ser incorporado a la madre sustituta y, después de su periodo gestante, nacerá la dupla de la mascota.

Para ViaGen Pets, la ciencia permite dar nuevas oportunidades a la vida y por ello aluden en decir que la clonación no cambia la composición genética de un animal. En efecto, los nuevos seres comparten rasgos físicos, de comportamiento y movimiento parecidos al de la muestra, sostiene la división de TransOva Genetics.

Clonación de animales en Colombia

Las plataformas de interacción social sí que saben llamar la atención de los demás. El marketing y la publicidad digital han subido hasta el punto en que cualquier contenido puede ser rentable, según expertos en analítica web. Sin embargo, lo que más predomina en los escenarios sociales son las tendencias, y la clonación, por el momento, puede que se quede atrás.

Felipe Restrepo, inversionista profesional, habló al respecto con el diario El Colombiano y no descarta que el negocio de la clonación tome provecho por su atractivo comercial. Sin embargo, para el experto la clonación de animales aún no se volverá una tendencia.

“Mientras la humanización de mascotas se siga manteniendo, se puede decir que servicios como estos ocuparán más espacios. Pero la clonación como tal no lo llamaría una tendencia. Es un servicio más dentro de un conglomerado de paquetes que ofrece la industria”, manifiesta Restrepo.

Para el hombre de negocios, una tendencia implica masificación y estos procesos aún son muy costosos para ser un punto clave de inversión.

En cuanto a la incursión de este negocio en Colombia, el inversionista profesional dice que “se podría explorar la posibilidad de prestar servicios de este tipo pero para exportación. Sin embargo, en el país hay barreras muy fuertes en cuanto a la logística: los materiales biológicos tienen unos niveles de conservación de la cadena de frío en los que no estamos muy avanzados, además de los obstáculos fitosanitarios que se podrían presentar”.