El sector de la caña ha sido uno de los objetivos de la estrategia del sello. | Foto: Oficina de Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito

El sello en los productos de quienes le apostaron a la sustitución

Los productos con el mensaje “Cultivando un mejor futuro” son el resultado del trabajo de campesinos que dejaron de plantar coca y ahora siembran y comercializan en la legalidad

27 de agosto de 2019

Una marca de esperanza está apareciendo en diveros productos colombianos. Se trata del sello Desarrollo Alternativo, que valida que ese producto es parte de la transicion que supone pasar de la ilegalidad a la legalidad. El cultivador, que antes se dedicaba a sembrar coca o a su procesamiento, ahora está vendiendo sus productos legales gracias a la sustitución de cultivos. 

En efecto, adquirir algún producto con el logo y el mensaje “cultivando un mejor futuro”, supone apoyar nuevas economías y emprendimientos colectivos.

Uno de los casos más emblemáticos es el de Sandra Palacios, quien relata la historia de su comunidad que ahora cultiva café en Santa Marta (Magdalena). Son una asociación de hombres y mujeres bajo el liderazgo de Palacios y cuya historia de retorno resulta emblemática. A Sandra, el conflicto le arrebató a su padre y hermano. Ella abandonó su finca y, al volver, agrupó a cultivadores que antes se dedicaban a la coca y empezó con ellos a sembrar café en la Sierra Nevada. Ahora trabaja con Woman coffee y su producto tiene el sello, que es un tomate con forma de corazón. 

 

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Estos son algunos de los productos que ya cuentan con el sello y están en el mercado. Archivo particular


 

La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) ha venido trabajando con el gobierno colombiano a través de diferentes iniciativas de Desarrollo Alternativo para estimular economías rurales lícitas y prósperas. El trabajo colaborativo permite potenciar el campo y fortalecer la agroindustria como fuente de empleo e inversión para lograr un desarrollo sostenible.

Los beneficiarios están localizados principalmente en zonas vulnerables o afectadas por cultivos ilícitos, los cuales son sustituidos por frutas, café, cacao, pimienta, palmito, sacha inchi, caña y actividades de ganadería, piscicultura y apicultura. 

Sin embargo, el Desarrollo Alternativo no solo busca la sustitución de cultivos ilícitos sino la generación de capacidades socio-empresariales, financieras y comerciales para promover la sostenibilidad, el acceso a mercados y la gestión de alianzas con grandes superficies y con puntos de venta regionales y locales.

Las asociaciones beneficiarias de los programas de Desarrollo Alternativo han logrado capacitarse en aspectos fundamentales para impulsar su competitividad, obtener los registros de marca y mejorar la distribución de sus productos.

Cosechando Esperanza, memorias del Desarrollo Alternativo

 

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En este video de la ONU se deja tetsimonio de casos de éxito. 


 

La apuesta del campesino por la paz y la legalidad es el primer paso para liberar al territorio de cultivos ilícitos, pero también se requiere el acceso a los mercados y el interés de los consumidores. Los productos de Desarrollo Alternativo han sido elaborados y transformados de manera responsable con el medio ambiente, cumpliendo las normas legales de sanidad y retribuyendo un valor equitativo a las familias productoras por su trabajo. 

“Cultivando Esperanza: Memorias del Desarrollo Alternativo” es un homenaje a once de las más de mil organizaciones que son muestra de constancia, resiliencia y sobre todo de entusiasmo por ofrecer un mañana próspero a sus comunidades. Sandra, Olber, Pedro, Jhon, Silver, Pablo, Marianelda, Neier, Ignacio y Consuelo son algunos líderes que como muchos otros colombianos se comprometieron con la legalidad y ahora están cultivando un mejor futuro.