PARAMILITARISMO
Yair Klein y otros 14 mercenarios que deberían responder en Colombia
Para el representante Iván Cepeda (Polo), el gobierno también debe pedir en extradición a cuatro mercenarios que fueron condenados junto a Klein e investigar una decena de nombres que aparecen relacionados con el israelí en el adiestramiento de paramilitares.
La extradición del mercenario Yair Klein ha sido una de la prioridades del Gobierno. Varias han sido las peticiones a Israel para que autorice su envío a Colombia, pero ese país no ha dado respuesta.
Klein fue condenado por un juzgado de Manizales por haber adiestrado a grupos paramilitares en el Magdalena Medio a mediados de los años 80.
Por eso, reclamando el fin del mutismo de ese gobierno, y exigiendo la extradición de Klein, un grupo de ciudadanos se congregó este jueves ante la embajada de Israel en Colombia, en una manifestación espontánea liderada por algunos dirigentes políticos colombianos.
Pero más allá del reclamo, también exigieron que el gobierno colombiano no sólo se concentre en pedir la extradición de Klein. Al menos otros 14 mercenarios, que habían hecho lo suyo para adiestrar a paramilitares, deberían responder ante la justicia colombiana.
Esa es la exigencia del representante a la Cámara Iván Cepeda, quien pidió a la canciller María Ángela Holguín “responderle al país” si existe petición de extradición contra trece ciudadanos ingleses e israelíes, y un australiano, que según varios documentos participaron con Klein en el adiestramiento de paramilitares.
Según la sentencia de primera instancia, proferida por el Juzgado Penal del Circuito Especializado de Manizales, la condena no solo afecta a Yair Klein. También a los israelitas Izhack Shoshany Meraiot, Tzedak Abraham y Terry Melnik.
Todos ellos fueron sentenciados a 14 años de prisión por haber “instruido o entrenado personas en técnicas y procedimientos militares con fines terroristas, agravada por haber sido realizada con procedimientos explosivos y empleo de armas de fuego”.
A juicio del representante Iván Cepeda no serían los únicos mercenarios que deberían responder en la justicia colombiana. Porque Yair Klein, recuerda el congresista, llegó a Colombia a ofrecer sus servicios contactado por el ciudadano israelí Mariot Shoshany, actuando en compañía de cuatro mercenarios más, Avraham Tzadaka, Amatzia Sheuli, Terry Melnyk, Yaakov Brine.
Estos nombres figuraron en uno de los primeros expedientes del paramilitarismo que a finales de los años 80 fueron revelados por SEMANA.
En el artículo titulado ‘Los perros de la guerra’ (octubre de 1989) también se menciona el papel de otros mercenarios; el caso de Mike Harari -ex jefe de seguridad del general panameño Manuel Noriega-, David Candotti, y los ingleses Peter McAléese, Dave Tomkins, Alex Lennox, Geffrey Adams. Este grupo de mercenarios ingleses estuvo entrenado por el austrialiano Terry Tagney.
La diferencia en estos casos es que no se conocen sentencias judiciales en Colombia.
La petición de Cepeda al gobierno colombiano se concentra en el estado de las investigaciones para corroborar la participación de estas personas en el adiestramiento de paramilitares.
Pero a la canciller le pide informar si hay pedidos de extradición contra los israelíes que fueron condenados junto a Yair Klein con el propósito que sean juzgados por los delitos cometidos en el país.
El Gobierno se mantiene a la espera de la respuesta de Israel sobre la extradición de Yair Klein. Para muchos, su presencia también sería útil para reconstruir la verdad y la memoria histórica sobre la conformación de los grupos paramilitares.
El senador liberal Juan Manuel Galán, hijo del inmolado Luis Carlos Galán Sarmiento y quien también lideró la manifestación contra Israel por su silencio ante el pedido de extradición de Colombia, propuso que ese país permita que fiscales colombianos interroguen a Klein para adelantar las investigaciones entre los nexos de las autodefensas que entrenó en los 80 y la dirigencia política y militar en esa época.