Más energía para Caldas y Risaralda: este es el plan de la CHEC para garantizar el servicio en todas las zonas rurales

Al menos el 70 por ciento de la energía eléctrica de Colombia proviene de hidroeléctricas y los proyectos desarrollados en torno a su operación tienen la facultad de transformar la realidad de los territorios, así lo aseguró Santiago Villegas Yepes, gerente de CHEC, la empresa de energía de los departamentos de Caldas y Risaralda, quien explicó que esta es una de las razones por las que la empresa se ha convertido en un agente de desarrollo en el Eje Cafetero.

En términos de distribución de energía, CHEC tiene la meta de completar el ciento por ciento de la cobertura rural en 2023. “La situación de la ruralidad nos tiene que mover, porque una vivienda que hoy no cuenta con el servicio está anclada al siglo XIX”, comentó Villegas Yepes. La llegada de la energía a las zonas más distantes del país se traduce, necesariamente, en desarrollo social y crecimiento económico para esos hogares, por ello “solo la posibilidad de acceder a la oferta educativa que facilita la tecnología puede cambiar la vida a mucha gente en esos territorios”, precisó el gerente de la empresa.

En su opinión, hoy el drama más notorio de la ruralidad del Eje Cafetero lo padecen las comunidades étnicas del occidente de Caldas, por su evidente desigualdad social. En este sentido, CHEC decidió aliarse con la Universidad de Manizales, la organización Travolution y la Corporación para el Desarrollo de Caldas, con el objetivo de aproximarse a esta realidad y fomentar el desarrollo local sostenible, a través de iniciativas como las de turismo comunitario, que trascienden la prestación del servicio de energía.

Capital social

CHEC ha asumido el reto de transformar realidades y llevar energía a los lugares más apartados de los 40 municipios de Caldas y Risaralda en los que hace presencia, entendiendo que su servicio se traduce en calidad de vida, educación, salud y progreso para los habitantes del territorio.

“El Eje Cafetero será la primera región que completará la meta del ciento por ciento de cobertura en energía eléctrica”, advirtió Villegas Yepes, quien también explicó que la región cafetera se encuentra en una posición privilegiada por el trabajo que décadas atrás impulsó la Federación Nacional de Cafeteros en materia de construcción de redes.

Estos esfuerzos se conservan y fortalecen gracias a las inversiones que CHEC realiza cada año para mejorar su infraestructura y optimizar la calidad y confiabilidad del servicio en la región; para 2022, por ejemplo, se invirtieron cerca de 92.000 millones de pesos en Dosquebradas (Risaralda), La Dorada y Marmato (Caldas), municipios que además de Manizales, reportan aceleradas dinámicas económicas, en sus sectores residenciales, industriales y mineros.

Para hacer todo esto posible, CHEC cree que es imprescindible trabajar de la mano de las comunidades y, fundamentalmente, garantizar la generación de desarrollo. “Nos hemos propuesto instalar capital social en los territorios y eso contempla fomentar el desarrollo de capacidades en las organizaciones sociales, en las juntas de acción comunales y en las organizaciones de base comunitaria”, detalló su gerente general.

Para CHEC no hay empresas saludables en territorios enfermos, por eso su mayor apuesta en el mediano y largo plazo será la de continuar concentrando esfuerzos para la estructuración y ejecución de acciones que apalanquen el desarrollo sostenible de su región.

*Contenido elaborado con apoyo de CHEC.